jueves, 26 de marzo de 2009

Arquitectos del Cinquecento: Andrea Palladio

Palazzo Thiene

"Basílica" de Vicenza




Andrea della Gondola (1508-1580) nació en Padua. Y desarrolló toda su obra en el Véneto. Es uno de los arquitectos mása importantes de Italia y de3 los más influyentes en la arquitectura desde el Renacimiento hasta nuestros días. Inicia su formación con Bartolomeo Cavazza, en cuyo entra como aprendiz de escultor en 1521. En 1524 es oficial al servicio de los canteros Giovanni de Porlezza y Girolamo Pitón. Desde 1537 es independiente, al encargarle Gian Giorgio Trissino la construcción de una villa en Cricoli (Vicenza). Trissino, humanista y literato, influye en él que viaja por el Norte, estando en Papua y Verona. En 1540 adopta el nombre de Palladio,en alusión a la diosa de la sabiduría, Palas Atenea. En 1541 viaja a Roma, que será decisiva para su formación. Allí entra en contacto con la arquitectura de la Antigüedad romana y con la obra de Vitruvio, regresando en 1545.

Ya en 1540 empieza a utilizar la combinación de arco y dintel, (evocación brunelleschiana de la capilla Pazzi), en villa Godi. En 1546 presenta el proyecto de reconstrucción de las lonjas o pórticos de la basílica, lo que le abre el camino hacia la gloria artística. El proyecto se aprobó en 1549, pero Palladio no podrá verlo terminado por falta de presupuesto. La renovación del edificio, el Palazzo della Regione, (al que Palladio rebautiza como “basílica”) se inspira libremente en las formas de la Antigüedad clásica, atendiendo más a los principios que fundamentan la belleza en el arte clásica. Concibe la fachada dividida en dos pisos, separados armónicamente con la repetición del “motivo palladiano”, es decir, la organización en rectángulos encuadrados por columnas y entablamento, en los que se dispone un sistema de arco y dintel sobre columnillas y en las enjutas; sobre los dinteles un óculo y rematando la fachada una balaustrada con pedestales, correspondiéndose con las columnas, para colocar estatuas. Pero la novedad fundamental de esta obra radica en que a la armonía de las proporciones, a la belleza clásica de las formas se une, por primera vez, la valoración de la luz. El fuerte contraste de la blancura nítida de las formas constructivas con las sombras y penumbras de los vanos y galerías produce un efecto casi pictórico, de armonía y cromatismo en su juego con el medio ambiente y con el cielo, lo que constituye uno de los fundamentos de su arte.

A partir de 1550 se reafirma su relación con el humanista veneciano Daniel Barbaro, comentador de Vitrubio y con quien colabora Palladio en la publicación de su obra en 1556. Su amistad con Barbaro le abre las puertas de Venecia. En 1558 construye la iglesia de San Pietro di Castello. En 1570, a la muerte de Sansovino, es nombrado arquitecto oficial de la Serenísima. En ese año publica los "Los Quattro Libri dell'Arquitectura" una de las obras más utilizadas por los arquitectos desde entonces. Su actividad se desarrollará fundamentalmente entre Venecia y Vicenza; construye villas, templos y edificios civiles de carácter diverso. Su importancia como teórico es esencial y en 1566 la Academia de Florencia le admite en su seno.

Entre sus villas más prestigiosas destacan: la villa Capra o villa Rotonda, encargo de Paolo Almerico. Sobre planta cuadrada, con cúpula y escaleras exteriores que desembocan en pórticos hexástilos, el ritmo de planos de los diversos frontones, la exquisita proporción de los elementos y la combinación del cuadrado en planta con la forma circular de la cúpula son factores que hacen de esta obra una de las más perfectas del Cinquecento; la villa Malcontenta, de planta central en la que la forma determinante es la cruz griega; con fachada lateral, pórtico hexástilo jónico logrando un efecto pictórico al combinarla con la gracia de los vanos de diversos tipos: ventanas amplias rectangulares, vanos termales y los remates de los frontones y destacados aleros; la villa Barbaro, decorada por Paolo Veronés, en la cual usa el orden gigante en el cuerpo central, con cuatro grandes columnas jónicas que recorren esta parte en toda su altura. La aparición del orden gigante, es decir, un orden de columnas que unifican la fachada al recorrerla en toda su altura, supone el triunfo de la visión conjunta prebarroca y constituye un precedente del siglo XVIII.

En 1550 diseña el Palacio Chiericati de Vicenza. La relación del edificio con el espacio circundante y la valoración de los efectos pictóricos, en el cual el juego de luces y sombras alcanza e
n esta obra un resultado sorprendente, mediante la combinación de pórticos abiertos y superficies macizas, frontones rectos y curvos y balaustrada con estatuas. Tiene una estructura de dos pisos organizados en tres cuerpos distintos y diferenciados. Hacia 1556, el Palacio Valmarana, donde utiliza el orden gigante en la fachada, recorrida por grandes pilastras corintias que unifican y proporcionan monumentalidad, constituyendo un precedente de los modelos del siglo XVIII

Como arquitecto religioso construye en Venecia el conjunto de San Giorgio Maggiore, claustro, refectorio e iglesia. El cuerpo de la iglesia se forma por la combinación de tres conjuntos: la planta basilical, el coro y el amplio presbiterio. En la fachada utiliza el orden gigante y la combinación palladiana de los remates en frontones que se cortan, sobresaliendo el cuerpo central, perfectamente enlazado con los laterales más bajos mediante los frontones. El efecto cromático de los elementos arquitectónicos, armónicamente destacados en su medio ambiental, el juego de pilastras y columnas, las ventanas termales que iluminan las bóvedas, la limpidez de la cúpula y la extraordinaria belleza del claustro, con columnas pareadas, materiales diversos y frontones rectos y curvos hacen de este edificio uno de los más bellos de Venecia.

Su última obra veneciana, la Iglesia del Redentor, corresponde a 1576. Siguiendo las ideas implícitas en San Giorgio Maggiore, logra una obra excepcional en la que se articulan elementos arquitectónicos (columnas, pilastras, entablamentos, nichos, vanos termales) valorados por el sentido cromático en el uso de distintos materiales, al tiempo que en el interior las capillas laterales ofrecen una suave iluminación que contrasta con la oscuridad excesiva de las capillas en las iglesias jesuíticas de la misma época.

Su última obra proyectada, ya en el último año de su vida, es el Teatro Olímpico en Vicenza. En él vuelve al modelo del Teatro clásico grecorromano pero cubierto: con graderío para los espectadores en círculos concéntricos y una grandiosa escena monumental, en la que los efectos ilusorios que se perciben por los vanos de la escena, dando una sensación de amplitud y lejanía; se conjugan con la animación en la fachada monumental con esculturas, relieves y formas arquitectónicas diversas.

lunes, 9 de marzo de 2009

Técnicas escultóricas

Las técnicas más importantes en la escultura son las siguientes:

Esculpir y tallar.- La eliminación de materia de un bloque de piedra o madera, que son los materiales más comunes, hasta “encontrar” dentro la forma deseada representa la noción más profunda de la escultura como arte. Entre las rocas más utilizadas por el escultor figura el mármol. También se emplean otros materiales pétreos como el alabastro, la piedra caliza o el granito, u orgánicos, como el hueso o el marfil.
Para trabajar la piedra se recurre, por una parte, a instrumentos punzantes, con los que se incide en la materia directamente o a través de un martillo, tales como el puntero, que conduce al desbastado inicial del material; varias clases de cinceles, de filo recto o bien dentado, con dientes puntiagudos o rectos, para ir conformando las superficies; el taladro, para perforaciones profundas, o el trépano, para algunos agujeros.
Por otra parte, hasta alcanzar el acabado final se requiere la utilización de limas, escofinas y piedras para pulir, coma la piedra pómez, el esmeril y materiales abrasivos con los que frotar, con objeto de alcanzar la pátina deseada.
A veces se pintan las superficies. Los escultores en piedra, que a lo largo de la historia se han organizado en talleres con actividades especializadas, suelen contar con modelos previos, frecuentemente en yeso, de la misma forma y volumen, con los que trabajar. El uso de los mismos requiere el conocimiento de procedimientos geométricos -cuyo dominio es, a veces, ajeno al propio artista que concibe la escultura- que permiten saber, mediante una caja de varillas ortogonales (denominada caja de sacar puntos), dónde debe aplicarse el golpe.

Modelar.- Frente a la concepción de la escultura como el resultado de un proceso de sustracción, existen varios procedimientos donde la expresión del volumen se alcanza mediante un concepto inverso, el de la adición. La ocupación del espacio escultórico mediante la manipulación de materia blanda (barro, yeso o cera) hasta alcanzar la forma ideada constituye uno de ellos. Estos materiales son trabajados con puntas de madera, distintos tipos de paletas y paletillas, telas húmedas y, fundamentalmente, la mano, que otorga una dimensión creativa directa a la tarea.
En el caso de la pieza escultórica modelada es preciso diferenciar la que constituye una obra final concebida como tal o la que supone un momento del proceso que desembocará en la obra definitiva, bien en piedra o bien fundida.

Fundir.- La escultura en bronce exige un modelo concebido con anterioridad cuyo volumen sea idéntico. A partir de ese original se realizan en negativo los moldes, que permiten el vaciado, lo que hace posible llevar a cabo cuantos originales se deseen mientras estos se conserven.
El procedimiento más habitual es la fundición en hueco, que exige la construcción de un núcleo, a modo de soporte, sobre el que se colocan los moldes, dejando un espacio vacío para la aleación.
Otro método muy común es el de la cera perdida: consiste en revestir de cera un soporte de material refractario; una vez modelada la cera, se cubre de nuevo y se calienta; la cera se funde (sale por unos agujeros hechos previamente) y deja el hueco que habrá de cubrir la aleación. Esta tarea se realiza, por lo general, en talleres especializados. Una vez extraída la escultura, se lleva a cabo una labor de retocado y pulido.

Ensamblar.- La idea de integrar elementos de procedencia diversa, con la intención de configurar un objeto susceptible de ser juzgado globalmente como una pieza escultórica unitaria está, con frecuencia, presente en la tradición histórica (la imaginería, por ejemplo), aunque el desarrollo sistemático de la idea de escultura como construcción, en su doble dimensión técnica y conceptual, está estrictamente ligado a las aspiraciones del arte contemporáneo.
El hecho de que, circunstancialmente, estos materiales tengan la forma de objetos con significados en otros contextos y estén más o menos modificados no afecta a lo esencial del proceso ejecutivo como tal. Cuando estos objetos se integran en un cuerpo único el resultado se denomina assemblage. En todo caso, el volumen resultante es susceptible, según sea el deseo del artista, de ser fundido en otro material.

VVAA.- Historia del Arte.- Enciclopedia del estudiante.- Santillana-El País. 2005. Pág. 45

Escultura del Quattrocento en Italia

lunes, 2 de marzo de 2009

Arquitectos del Quattrocento Italiano 2



León Battista Alberti
Palazzo Rucellai

León Battista Alberti es el otro gran arquitecto del Quattrocento italiano. Seguidor de Brunelleschi, aplicó su método constructivo clasicista no solo en iglesias, sino también en palacios. Concilió la casa tradicional, con paredes y ventanas y la forma clásica introducida por aquél. Lo consiguió en el Palacio Rucellai (1460), en cuya fachada no encontramos parecido con ninguna ruina clásica, pero en la que emplea formas clásicas para decorarla. En lugar de columnas o semicolumnas cubrió la casa con una red de pilastras y entablamentos que sugieren un orden clásico sin variar la estructura del edificio. Es patente en dicha fachada la influencia del Coliseo de Roma, donde en cada piso se utiliza uno de los tres órdenes griegos para lo que dota al edificio de ritmo y armonía. Sin embargo no rompe del todo con las formas góticas, hecho que se evidencia en las ventanas. Alberti tradujo, pues, el diseño gótico a las formas clásicas, suavizando el “bárbaro” arco apuntado y utilizando los elementos del orden clásico en un contexto tradicional.

A) Templos:

San Andrés de Mantua: Con fachada armoniosa, articulada en torno al arco de entrada prolongado hacia el interior, con bóveda de cañón. El arco está enmarcado por pilastras corintias, muro con superposición de tres ventanas. La fachada remata en un frontón triangular: es un gigantesco arco triunfal romano. En el inerior destaca la bóveda de cañón de la nave central, decorada con casetones ; capillas laterales sustituyendo a las naves laterales, enmarcadas con pilastras corintias y bóvedas de cañón y casetones.

San Francisco: También llamado Templo Malatestiano en Rímini, inacabado y concebido como un conjunto rectangular, basado en la “proporción áurea”. Nave central a la que se abren capillas rectangulares, sobre un podio. La fachada combina arco y dintel, con claroscuro en los volúmenes. La fachada está también concebida como un arco triunfal de tres vanos. Solo está abierto el central, debería tener un segundo cuerpo unido por volutas.

B) Palacios:

Palacio Rucellai: La fachada, con decoración de almohadillado y disposición en tres plantas. La baja tiene función comercial. Estructura horizontal marcada por los órdenes y entablamentos , pero también vertical, enmarcada por las columnas. Los órdenes se superponen: dórico, jónico y corintio. El piso inferior es más alto, y para hacer las columnas de los pisos iguales puso un banco corrido abajo, como la cornisa arriba. La decoración de la fachada crea un contraste lumínico.

Arquitectos del Quattrocento Italiano



Filippo Brunelleschi
Capilla Pazzi, interior
Los florentinos deseaban que su catedral fuera coronada con una cúpula enorme; pero ningún artista era capaz de cubrir el inmenso espacio abierto entre los pilares sobre los que debía descansar dicha cúpula. Solo Brunelleschi imaginó un método para realizarla, dejando de lado el estilo tradicional y recuperando la grandiosidad de la arquitectura romana. Se dedicó a medir las ruinas de templos y palacios, tomó notas y apuntes de sus formas y adornos. No los copió, sino que propuso un nuevo modo de construcción, en el cual las formas de las arquitectura clásicas se empleasen libremente y crear modalidades nuevas de belleza y armonía. Es el arquitecto de la sencillez.
Su propuesta fue adoptada por los arquitectos de Europa y América durante casi. cinco siglos. Si Brunelleschi se propuso crear la arquitectura de una nueva era, lo consiguió plenamente. Combinó columnas, pilastras y arcos en su propio estilo para conseguir un efecto de levedad y gracia, diferente a cualquier otra construcción anterior. Detalles como el esquema de la puerta, con el frontón clásico demuestran la influencia del clasicismo en Brunelleschi. La Capilla Pazzi muestra claramente esta transformación constructiva. Las pilastras no soportan el peso de la bóveda; solo son decoración para insinuar el retorno al orden clásico y destacar la forma y proporciones del interior.
Brunelleschi no solo fue el iniciador de la arquitectura del Renacimiento; también se cree que fue el inventor de la perspectiva. Brunelleschi proporcionó a los pintores los medios matemáticos para solventar el problema: lograr que los objetos parecen disminuir en tamaño conforme retroceden hacia el fondo. Ni griegos ni romanos conocieron las leyes matemáticas que el arquitecto florentino manejaba. Una de las primeras pinturas en que se aplica la perspectiva es la de Masaccio en Santa María Novella: La Santísima Trinidad con la Virgen y San Juan (1427)
Entre las obras más destacadas de Brunelleschi sobresalen las siguientes:

A) Templos:

Iglesia de San Lorenzo: Planta de cruz latina, 3 naves , capillas laterales, cúpula en el crucero. Proporcionada. Uso del cuadrado en: coro, brazos del transepto. Decoración clásica(columnas corintias, pilastras acanaladas), arcos de medio punto, entablamento y casetones. Bicromía: piedra gris en los elementos clásicos y blanca en los muros.

Capilla Pazzi: Planta centralizada, cuadrado cubierto con una cúpula sobre pechinas. Fachada e interior combina arco y dintel, bicromía blanco y gris, pureza de líneas, geometría con pilastras que dividen el muro, decoración con medallones esculpidos.

Iglesia del Santo Espíritu: modelo de basílica romana, 3 naves separadas por arcos de medio punto, techumbre con casetones.

Cúpula de Santa María dei Fiori: Inspirada en la del Panteón, con dos cúpulas superpuestas, semiesférica la interior, apuntada la exterior; los empujes de cada una se contrarrestan. Tambor octogonal, en él se abren óculos. Sin embargo, no hubiera podido construirla sin el conocimiento tan preciso y completo que poseía sobre el arte gótico de abovedar.

B) Hospitales:

Hospital de los Inocentes: Conjunto de dos plantas, la baja en forma de loggia o galería cubierta y abierta a la plaza pública con columnas corintias, arcos de medio punto y medallones. Las ventanas rematan en frontón triangular.

C) Palacios

Palacio Pitti: Atribuido tradicionalmente a Michelozzo, es un tradicional palacio florentino. Con patio interior que articula todo el edificio, que consta de tres plantas, siendo el piso bajo más alto que los otros dos. Tiene decoración clásica, con arcos de medio punto y el tradicional almohadillado.